Déjà vu, engaño y manipulación
(Legalizar o legalizar) El reciente debate que suscitó el fallo de la Corte Constitucional en relación con el consumo de drogas y alcohol en espacios públicos no tiene mayores opciones de prosperar ni de construir un consenso saludable en términos políticos, sociales ni democráticos; al menos no como inicialmente fue planteado porque no es serio, profundo ni siquiera real y a la larga tampoco puede considerarse un debate por tres razones: 1. No va al fondo del problema ni lo plantea desde una perspectiva lógica; 2. Se presenta como excusa para generar animadversión hacía las altas cortes; y 3. No confronta argumentos sólidos que permitan entablar una mínima discusión. La sensación que queda luego de observar las reacciones que el fallo generó en las filas del uribismo y sectores afines, es que se han quedado sin agenda política y norte programático; por eso cualquier tema les funciona para arremeter sin reflexión en aras de impulsar sus campañas electorales a través de la ind...